Akros te trae un articulo en el que hablaremos un poco de cómo los trastornos autistas afectan al neuro-desarrollo, además, describir cómo se alteran las relaciones afectivas y sociales de los niños y su comunicación verbal y física con las personas que los rodean.
El autismo, más conocido como Trastorno del Espectro Autista (TEA) es, como su nombre indica, un trastorno, neuro-biológico, que se manifiesta en tempranas edades y que acompaña al niño durante toda su vida.
Trastornos autistas en niños
Sus causas se desconocen, suele aparecer a partir del año y medio de vida del niño. Su frecuencia, según ciertos estudios, ronda 1 de cada 250 partos y, por sus características, se lo define como un trastorno del desarrollo. Espectro autista es la denominación médica de la gran variedad de síntomas asociados.
Se identifica por la aparición de retroceso en habilidades adquiridas, así como la pérdida del habla o la audición. El pequeño con autismo carece de interés social, pero sí desarrolla un vínculo exagerado con aquellos objetos que considera suyos. Su comportamiento se basa en una gama restringida de patrones repetitivos. Esas conductas implican que el niño sufra cuando existen cambios en sus rutinas diarias.
El especialista debe diagnosticar la existencia del trastorno y la terapia individualizada para cada caso. Los síntomas del autismo infantil podrían confundirse con los de la esquizofrenia infantil y el tratamiento sería muy distinto.
Para diagnosticar el tipo de autismo que padece un niño y el grado del trastorno, primero se requiere el examen de su comportamiento. Gracias al diagnóstico, se podrán adoptar medidas personalizadas para cada niño. Se recomienda que el pequeño acuda a terapia ocupacional. Se necesita un desarrollo equilibrado de la especialización del niño mediante actividades grupales o en solitario.
Cuáles son los síntomas
El autismo es un trastorno cognitivo que incide en la capacidad de empatía del niño. A resultas del síndrome, queda afectada la capacidad de comunicación y la interacción social del paciente.
La enfermedad no tiene cura en la actualidad, sin embargo puede lograrse una mejora sustancial de calidad de vida para el niño y su familia. Los casos son distintos entre sí, pero ofrecen algunas similitudes en común. Los primeros síntomas del autismo son los siguientes:
- Los niños no piden, ni necesitan consuelo si se sienten mal.
- Nunca reconocen sus sentimientos ante las demás personas.
- Evitan jugar con el resto de niños; suelen entretenerse en solitario.
- Su comunicación, así como sus habilidades lingüísticas, son limitadas.
- Continúa realizando sus conductas a pesar de las llamadas de atención o sonidos. Tampoco responde a su nombre.
- Se muestra renuente al contacto físico con otras personas.
- Son incapaces de reconocer lo que sienten las otras personas.
- No saben imitar lo que ven.
- Preocupación excesiva por determinados objetos.
- Se aferran al seguimiento de rutinas.
Tipos de autismo en niños
Los síntomas del autismo se manifiestan alrededor de los 3 años. Las causas son desconocidas, aunque se sabe que carece de influencia en su aparición la raza, el nivel cultural o el país. En cuanto al sexo, los niños respecto a las niñas presentan el cuádruple de posibilidades de desarrollar un trastorno.
Se formularon teorías sobre la relación de ciertos genes con el autismo, al igual que determinadas irregularidades cerebrales e influencia de factores ambientales. Algunos de los pacientes de autismo añaden al síndrome otros tipos de retraso.
El comportamiento de los niños autistas es inflexible, pues son renuentes a cambiar su rutina. Sus hábitos y repeticiones los afianzan como personas hasta el punto de obsesionarse con determinadas repeticiones de conductas, y por ello no les gustan los cambios. Existen diferentes tipos de autismo diagnosticables y diferenciados entre sí:
Síndrome de Asperger
El síndrome de Asperger es un trastorno que se caracteriza por la dificultad en general de socialización y comunicación. Un niño con Asperger suele tener alto coeficiente intelectual, pero le resulta incapaz entender las señales no verbales en las relaciones sociales. Suelen obsesionarse por determinadas actividades hasta el punto de convertirse en expertos sobre el tema de su interés.
Síndrome de Rett
El síndrome de Rett es un trastorno caracterizado por un déficit en el aprendizaje, el desarrollo del habla y la coordinación. Los niños con Rett son incapaces de comunicarse con la sociedad y realizan movimientos obsesivos con las manos. El síndrome suele afectar a mujeres.
Síndrome desintegrativo de la niñez
El síndrome desintegrativo provoca que el niño pierda los conocimientos adquiridos a lo largo del tiempo. El paciente pierde sus capacidades motrices, lingüísticas y de sociabilidad.
Trastorno del desarrollo no especificado
Encuadra a aquellos niños autistas que no cumplen con los criterios diagnósticos de otros trastornos y presentan déficits graves en la socialización, comportamiento y en la comunicación.
Función de la familia con un niño con trastornos autistas
No se conocen las causas por el que un niño padece autismo es, sin embargo, existen estudios que lo relacionan la aparición del síndrome con la influencia del entorno. Entre los factores externos, puede resultar determinante la afectividad que el bebé recibe de sus padres o familiares. Otros factores, en cuanto a deficiencias neurológicas, aparecen durante el embarazo o por causa hereditaria.
Sea la causa que fuere, el niño con autismo necesita una educación especializada. En una escuela normal, los niños con autismo pueden sufrir discriminación por otros pequeños de su edad. Resulta fundamental que las personas del entorno del niño sean pacientes y motivadoras.
Dentro de los principales problemas de los niños con autismo es que suelen ser discriminados entre los niños de su edad, tanto por desinformación como por inmadurez. Es importante que las personas que rodean al paciente sean pacientes y motivadoras, ya que esto fomentará la integración de los niños.
Dentro de las características de la enfermedad, un niño autista puede conservar capacidad de comprensión, e incluso habilidades sobresalientes. De ahí la influencia del grado del autismo para conocer su capacidad de relación en sociedad.
Trastornos del lenguaje en niños autistas
En el autismo una de las causas principales y que primero se hacen evidentes es la dificultad para el desarrollo y evolución en la comunicación del lenguaje oral, además de una nula relación social con el resto de niños
No hablar y no relacionarse mediante el idioma es la principal causa que nos hace interpretar un posible caso de autismo. Este hechor repercute seriamente al trato con el menor, ya que no exterioriza ningún tipo de sentimientos, lo que frustra a padres y educadores.
Pautas a seguir en casa
El autismo no es un síndrome curable, pues cada niño presenta diferente historial médico. Tampoco existe medicación específica para el autismo, aunque sí que se ha desarrollado para el resto de trastornos asociados a él.
Es fundamental que los pequeños reciban un diagnóstico correcto antes de cumplir los 2 años de edad. Estos pacientes tratados con antelación logran adquirir bastante buena interacción social e integrarse como adultos en el mundo laboral y de la familia. Unos enfermos lograrán una vida independiente cuando maduren, y otros necesitarán ayuda en la edad adulta.
Jamás existen dos casos exactamente iguales entre sí. Los síntomas del pequeño pueden ser apenas perceptibles y permitirle realizar sus quehaceres del día, pero también puede tratarse de una sintomatología grave que requiera atención especializada. La evolución del síndrome será tan variada como los pacientes. El pronóstico empeora en pequeños que posean bajo coeficiente intelectual o que no sean capaces de comunicarse llegados los 5 años.
La intervención temprana e intensiva en el desarrollo de los niños autistas mejora el pronóstico a largo plazo. Entre los diferentes programas de tratamiento, destacan:
- Terapia conductual. Padres y maestros necesitan un entrenamiento previo para administrar esta terapia a los niños. Se basa en adiestrar la conducta estimulando actos deseados y limitando los indeseados.
- Educación especial. Creada para desarrollar la socialización y el manejo del lenguaje.
En Akros queremos ayudar a los niños que padecen de autismo, creando y desarrollando juegos exclusivamente para ellos.
Juegos para niños con trastornos autistas
Los niños con autismo pueden mejorar su comportamiento y sus relaciones sociales con tratamientos y actividades. La intervención temprana se ha demostrado clave en que el desarrollo sea favorable para que se normalice su evolución y se puedan desarrollar todo el potencial máximo del niño. Para mejorar ambos rasgos, los padres y educadores cuentan como material como juegos para el lenguaje y juegos sensoriales y juegos de asociación.
Musicoterapia para niños Autistas
Ademas de juegos y recomendaciones en casa, en Akros consideramos importante informar acerca de cuáles son los mejores métodos para acompañar al niño con trastorno autista, en este caso hablamos de la musicoterapia.
La musicoterapia utiliza técnicas a través de la música y a su vez de los instrumentos, para promover la apertura de canales de comunicación.
Se evalúa a cada niño cuidadosamente, ya que las aplicaciones no serán las mismas, y contribuye a la auto-definición. Por otro lado se encarga de relajar el estrés, la angustia, la ansiedad y colabora con diferentes patologías.
En la musicoterapia se aplican una gran cantidad de técnicas para los niños, entre las mas importantes están:
- El canto solo
- La audición musical
- Movimientos para seguir los ritmos
- Los juegos creativos musicales
- Tararear las canciones
- Tocar instrumentos musicales
- La reproducción espontánea de ritmos
- Los ejercicios de vocalización
La musicoterapia y sus beneficios son reconocidos por profesionales de la salud, por lo que se ha recomendado mucho estos últimos años. Se ha demostrado en estudios que la musicoterapia responde positivo en individuos con trastorno autista.
Es importante recalcar que es necesario la sensibilizacion y concienciación de las personas alrededor del mundo con respecto al autismo. El momento de informarnos y cambiar nuestro futuro a nuestros niños es ahora.
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