DiscusiónLos falsos mitos sobre el trastorno bipolar pueden resultar contraproducentes. Cerca del 70 % de los casos está subdiagnosticado, y muchos enfermos ignoran su condición y no reciben ayuda apropiada.

Mitos y verdades sobre el trastorno bipolar

El trastorno bipolar, también denominado Trastorno Afectivo Bipolar (TAB) y antiguamente psicosis maníaco-depresiva (PMD), es una enfermedad mental severa e que, si no se trata de manera rápida y apropiada, puede causar sufrimiento grave y e incapacitante. Este trastorno se caracteriza por alteraciones severas en el estado de ánimo, las emociones y el comportamiento, todos los cuales tienen una duración bastante variable.

Estos cambios de humor se caracterizan por la alternancia de episodios maníacos y episodios depresivos, por lo que esta patología se denomina bipolar. Las oscilaciones patológicas del humor persisten durante años, y ejercen sobre la persona un impacto significativo en la vida del individuo; resultan fuertemente debilitantes tanto en el nivel laboral como en el social, afectivo y familiar.

Tratamientos del TAB

La mayoría de las personas con trastorno bipolar, incluso con formas graves, puede lograr un excelente nivel de estabilización de la enfermedad y llevar a una vida normal. Dado que el trastorno bipolar es una enfermedad recurrente, casi siempre se indica un tratamiento a largo plazo, incluso de por vida. Una combinación de farmacoterapia, combinada con tratamiento psicosocial, resulta óptima para controlar y estabilizar al paciente. En la mayoría de los casos, el trastorno bipolar responde mejor a los tratamientos continuos en lugar de intermitentes. A veces, sin embargo, sin interrupción del tratamiento, pueden ocurrir cambios de humor, que deben ser reportados al médico de inmediato.

ProblemaLa medicación para el trastorno bipolar se basa en estabilizadores del tono de humor, que evitan la recurrencia de cambios anímicos. También los anticonvulsivantes tienen el efecto de estabilizar el estado de ánimo, e incluso los antipsicóticos atípicos.

Además de la terapia farmacológica, la psicoterapia puede ser de gran ayuda para aquellos que sufren de este trastorno. La psicoterapia no puede reemplazar a las drogas y no es eficaz solo para prevenir las recaídas y tratar el trastorno. Sin embargo, las intervenciones psicológicas pueden mejorar la estabilidad del estado de ánimo, reducir la hospitalización y ayudar al paciente a conocer mejor su funcionamiento y aceptarlo. El paciente aprende a distinguir entre su personalidad y la enfermedad, mejorar el manejo del estrés e indirectamente reducir los factores de riesgo de recaída.

Mitos sobre el trastorno bipolar

Falsedad: el trastorno bipolar no se puede tratar.

En realidad, un diagnóstico temprano y una terapia personalizada para cada paciente, junto a la medicación adecuada, resulta eficaz para lograr la remisión de los síntomas de los episodios maníacos y depresivos.

Figura depresiónEs una enfermedad rara que afecta a mujeres a partir de 50

Lo cierto es que el trastorno incide en casi el 2 % de la población, afectan a hombres y mujeres por igual y suele iniciarse al final de la adolescencia. Los factores hormonales de hombres y mujeres explican los diferentes síntomas por género: las mujeres, por ejemplo sufren más episodios depresivos, mientras que los hombres más episodios maníacos.

Sólo afecta el estado de ánimo

Es la mayor falsedad sobre la enfermedad. Padecer trastorno bipolar no significa estar siempre triste, o movido por cambios radicales en el estado de ánimo; el trastorno bipolar implica, además de la esfera emocional, alteraciones y cambios a nivel de juicio racional, falta de energías en el cuerpo, déficit de concentración y la memoria, e incluso la inhibición de la libido. Los síntomas pueden conducir a la depresión y baja autoestima.

El enfermo no puede llevar una vida normal

Otro mito. Como enfermos crónicos, si los afectados por el trastorno reciben una atención adecuada, y toman las medidas para controlar los síntomas, pueden llevar una vida absolutamente funcional en todos los aspectos. Triunfar en el trabajo y en las relaciones de pareja o familiares. Ejemplos de enfermos bipolares (diagnosticados) exitosos son los artistas Demi Lovato, Stephen Fry, Mel Gibson o Robbie Williams.

Sólo pueden ayudarles los medicamentos

Por fortuna, aunque el enfermo bipolar necesita ayuda profesional, porque no podrá equilibrarse por sí mismo, también puede aportar su granito de arena en su recuperación y mejorar su vida cotidiana. Para ello, aunque la base de su estabilidad es la medicación, también puede configurar su de vida enfocada a su bienestar, y realizar actividades que lo ayuden a centrarse, como el yoga o la terapia emocional; o llevar una dieta sana, hacer deporte, dormir las horas necesarias y alejarse de las adicciones y personas y relaciones tóxicas.

El suicidio no es un gran problema

El riesgo de suicidio en un paciente bipolar es alto, unas veinte veces mayor que el resto de la población. Una persona con trastorno bipolar no quiere suicidarse, pero trata de mitigar sus emociones a través de diversas prácticas autodestructivas que pueden salirse de su control. Además, la manifestación temprana de la enfermedad y su naturaleza recurrente implican un alto costo en términos de calidad de vida (el trastorno se asocia a menudo con los accidentes, el ayuno y la deshidratación, la tendencia a subestimar los peligros, enfermedades cardiovasculares, etc.).

Los enfermos con trastorno bipolar son débiles

Falso. Que se sientan débiles a causa del trastorno, no implica que lo sean; muchas personas con trastorno bipolar no pueden pedir ayuda, porque la incapacidad para gestionar sus emociones les hace sentirse desfondados. El trastorno bipolar es simplemente una condición que puede ser tratada de manera que el paciente, con la atención y el apoyo adecuado, puede lograr el equilibrio que necesita.

El paciente bipolar oscila constantemente entre la depresión y la manía

Este mito sólo es cierto en los pocos pacientes afectados por trastorno de ciclo rápido. La mayoría de los pacientes tienen largas fases de depresión, en comparación con las fases maníacas, que son leves y pasan con rapidez y sin apenas problemas. Otra leyenda urbana alude a que en el trastorno bipolar severo prevalece fase maníaca, pero la verdad es que la expresión más común de trastorno bipolar es la depresión. Hasta en el trastorno bipolar tipo I, la forma más grave, la fase depresiva es aproximadamente tres veces más frecuente que maníaca.

Verdades sobre el trastorno bipolar

Existe una predisposición genética a la enfermedad

Existe cierta predisposición genética en ciertas condiciones, y la enfermedad podría activarse ante la presencia de factores estresantes, como problemas en las relaciones, psicológicos o por cambios de vidas sustanciales.

Comenzó a tratarse en la antigua Roma

En el Imperio Romano se recurría a las aguas de cierto balneario para el tratamiento de ciertos casos. En la edad moderna se demostró que aquellas aguas contenían sales de litio, eficaz estabilizador del humor que aún se aplica en el tratamiento.

El trastorno bipolar se asocia con el abuso de sustancias

Existen numerosos diagnósticos duales donde el paciente sufre el trastorno psiquiátrico y la adicción al alcohol o drogas. Este abuso enmascara y agrava las consecuencias del trastorno y dificulta su tratamiento.

Los síntomas del trastorno los causan desequilibrios bioquímicos cerebrales

Se estima que un desequilibrio en la serotonina y dopamina pueden causar los síntomas. La dopamina se relaciona con los síntomas delirantes, y la serotonina con los ansiosos y depresivos.

La mayoría de los enfermos ignoran su condición.

El trastorno se diagnostica mal, o no se diagnostica en casi el 70 % de los casos. Una de los motivos es que transcurren años entre el inicio de los síntomas y el diagnóstico definitivo.